A veces existen sentimientos recurrentes, unos más que otros, unos con más intensidad que otros, pero lo que me ha perseguido este último tiempo es una sensación de culpa, de no haber hecho lo correcto... cuando tenías todo para hacerlo. Es como "llorar sobre la leche derramada", y aunque ya no tiene solución (el pasado no vuelve, y el futuro es incierto, sólo existe el aquí y ahora), siempre quedará esa sensación de "¿qué hubiese pasado si...?" No es arrepentimiento, es sólo que quizás las cosas hubiesen tenido un curso distinto, y no estarían como están ahora. Lo que pasa es que siento que hice todo al revés... ilusionándome y jugándomela a concho por otras personas, tratando de buscar "su" bienestar, y me olvidé de mí. Ellas sí vieron por ellas, y ahora están bien, con un buen pasar. Pero yo no tengo nada que ofrecer... voy a cumplir 29 años y aún estoy en la casa de mis viejos (aunque con unos tremendos deseos de salir corriendo de aquí), recién me voy a titular, cuando debí hacerlo hace por lo menos 2 años atrás; materialmente hablando estoy en la ruina, ni siquiera mi cama es mía; económicamente mejor ni hablar. Y emocionalmente... la verdad es que aún no sé si pueda ofrecer algo a alguien, no creo que alguien sea atractivo en estas condiciones. Sin embargo, hay una personita que a pesar de la distancia ha creído en mí, y ha devuelto la alegría a este aproblemado corazón... ha sido como una luz en medio de toda esta oscuridad. Pero ésta sensación no se va, y no quisiera decepcionarte... quiero intentarlo, pero no sé si me recibas así, con toda la carga que ello implicaría.
jueves, abril 06, 2006
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